Rutas para calentar el aceite. TF-111

La vorágine del día a día hace que no podamos disfrutar todo lo que nos gusta de nuestras monturas, quedando en muchas ocasiones solo el fin de semana para disfrutar del viento en la cara. Muchos dirán yo tengo la suerte de trabajar con ella pero no es lo mismo salir a rodar sin la presión del reloj, parando donde nos apetece y con como únicas preocupaciones el buscar algún buen lugar para aplacar nuestra hambre y buscar algún lugar donde llenar el deposito de nuestros vehículos de ese liquido elemento llamado gasolina aunque esto ultimo en Canarias no supone  ningún problema.
Para tal fin me gustaría ilustrarles con algunas "rutas" por llamarlas de algunas maneras que para mi son simplemente tramos de carreteras cercanos y de breve recorrido. Probablemente el que nos ocupa es uno de los mas cortos, la carretera de los Campitos en Tenerife. Mas que una ruta podríamos decir que este camino es la manera larga de ir desde el santacruzero barrio de la Salud hasta la zona de la Cuesta en La Laguna y viceversas.
A mi en particular me gusta entrar por barrio nuevo y hacer la primera parada en el mirador de los Campitos donde, para mi, se consigue la mejor panorámica de Santa cruz de Tenerife. seguidamente avanzamos en dirección al barrio de los Campitos, unas pocas curvas mas adelante y que da nombre a esta carretera. En cuanto a lo personal este enclave me devuelve a mi infancia ya que jugué durante unos años al fútbol en el equipo del barrio, equipo por cierto que tenía uno de los pocos campos de fútbol de césped natural que había en Santa Cruz en la década de los noventa, el cual por cierto ya no es mas que una yerma explanada de la que ya no queda nada de aquella alfombra verde por la que tanta carreras eche detrás del balón. 
Este barrio cuenta también con una infraestructura sin parangón por su escasa o mas bien nula aportación al aprovechamiento de aguas, la famosa presa de Los Campitos de la que podemos conseguir la mejor panorámica desde el Lomo de las Casillas, punto mas alto de nuestro breve paseo en moto. Seguidamente descenderemos un puñado curvas más y en menos que canta un gallo nos recibirá el núcleo de Valle Jimenez donde podremos parar a tomar al algo en el bar casa Álvaro y repostar en la estación de servicio que hay allí. Posteriormente seguiremos descendiendo para, una vez pasamos el polvorin de Valle Tabares, salir a la avenida los menceyes por la rotonda de bar Maracaná. Habremos recorrido unos escasos 12 kilometros , lo dicho lo justo para calentar el aceite y sentir un poco de aire en el casco.